Tener un caballo en tu vida es un regalo. Puede enseñarle valor a un joven, conquistar el miedo ante una caída, o ser humillado públicamente por un caballo ante los ojos de los demás, es una hazaña admirable para cualquier niño. Por eso, podemos estar agradecidos.
Los caballos nos enseñan responsabilidad, un caballo necesita cuidado constante, y la mayoría de las veces esto significa atención y compromiso.
Los caballos nos enseñan responsabilidad, un caballo necesita cuidado constante, y la mayoría de las veces esto significa atención y compromiso.